La maldita sociedad creada por los realities-shows

Me veo en la necesidad de compartir algo de lo que me he dado cuenta en los últimos días. Todo surge de un vídeo que alguien compartió en Facebook sobre cierto reality-show donde los concursantes respondían ciertas preguntas de cultura general. Hasta ahí, todo normal. Lo que me pareció increíble fue las respuestas que aquéllos daban. Las ridículas respuestas que daban. Y es que es palpable la incultura que hoy en día, muchos jóvenes, tienen.

No hablo de preguntas que sólo alguien con un coeficiente intelectual superior a la media pueda responder o cuestiones que solo aquellos que hayan podido estudiar una carrera universitaria puedan tener, sino preguntas sobre conocimientos básicos, que cualquier niño de primaria o secundaria están adquiriendo en estos momentos. Cuestiones de geografía, historia o matemáticas como, por ejemplo, en qué Comunidad se encuentra Zaragoza, cuál es el gentilicio de Burgos o dónde se encuentra la Torre de Pisa. 

Pero aun peor es saber que esos programas siguen emitiéndose año tras año sólo porque su audiencia, es decir, todos aquellos que prefieren ver como unos inútiles conviven, discuten y se acuestan unos con otros y otros con los unos, supera a la de otras series o programas que sí suponen una verdadera fuente, ya no de conocimientos culturales sino de cuestiones que tienen que ver con aquellos problemas que verdaderamente nos deberían preocupar como el aumento del paro o la corrupción en los partidos políticos. 

Que un español medio prefiera ver Gran Hermano, Mujeres y Hombres y Viceversa, Adán y Eva y tantos programas con las mismas características a un programa donde te muestren los problemas sociales del mundo donde vivimos, un simple partido de fútbol o un programa musical, dice mucho de la sociedad que estamos creado. No quiero ni pensar como serán esos jóvenes que ven esos realities o participan en ellos dentro de 15 años, hacia donde se dirige una sociedad que solo piensa en llegar a casa para ver si Fulanito de tal se ha besado con Menganita o si Menganito ha sido infiel a su novia con el primero que se ha encontrado en una discoteca. 

Día tras día se está demostrando con esos programas que lo ideal es conseguir entrar en uno de ellos, fingir ser una persona que no eres, con una vida que no tienes con el único propósito de conseguir ganar 3.000 euros a la semana con solo tumbarte en un sofá, sentarte en una silla, discutir con el uno y con el otro y contar toda tu vida, tu absurda y aburrida vida que no interesa a nadie más que aquel que quiere, en cierta medida, seguir tus pasos.

Una cosa está clara. Todo el mundo se llevará las manos a la cabeza con la incultura que estos individuos representan pero no dejarán de ver semana tras semana el programa y eso, de cierta forma, significa animarles a seguir siendo así, a establecer ese estilo de vida como lo más normal y que día tras día, más y más jóvenes decidan seguir con su ejemplo. Hasta yo, que no veo ninguno de esos programas (bueeeno, valeee MYHYV de vez en cuando xD), solo con ver el maldito video estoy colaborando con que esa incultura sea la base de nuestra sociedad. Y eso no puede seguir así.